Sí tu ofrendas y diezmas fielmente Dios no va a dejar de darte, la palabra dice que él da a quién siembra. Así que aprovecha cada semilla para sembrar y recibir cosecha. De esa siembra depende tu cosecha.
No tienes porque vivir en escasez, el diablo no tiene potestad para eso. Igualmente si el diablo te lo quitó, regresa a quien te lo dio, tu Padre, que el tiene más para darte y hasta el doble. Pero la tierra no le va a dar frutos a quien no haya sembrado. Y debes tener fe en tu semilla, tu debes esperar que tu siembra muera, vuelva a caer y de frutos para que tu vuelvas a sembrar.
Lo único que puede recibir cosecha es la siembra, no el regalo.
Nuestra semilla debe tener una dirección específica y correcta para que tenga cosecha porque lamentablemente no todo el mundo es tierra.
Todos tenemos algo que podemos convertir en una semilla para recibir un milagro.
Personas que no tenga al Espíritu Santo no puede ser redargüido de pecado porque no hay nadie que lo redarguya de pecado.
El problema actual de las iglesias es que los pastores están diciendo lo que el pueblo quiere oír. Y la verdad de Dios es que deben oír lo que no quieren ni les gusta, porque eso es lo que los corrige y ordena. Lo que ellos quieren escuchar los mantiene en el mismo vicio, ciclo, pecado.