1 Corintios 2:9

9 Antes bien, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han subido al corazón del hombre, son las que Dios ha preparado para aquellos que le aman. 10 Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu, porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios

El sistema de este mundo nos prepara siempre para esperar lo peor, podemos verlo con la pandemia, la estimación de los muertos que vendrán a futuro, y el mundo se sujeta y lo cree. Pero tu que eres hijo de Dios no puedes dejarte comprar por eso, por el sistema del mundo, la OMS, los economista, etc.

Tu eres hijo de Dios con autoridad, por lo tanto revoca toda maldición que viene de ellos para tu vida. No te sientes a esperar lo peor, párate porque Dios te ha dado vida y salud. Dios te dio vida en la cruz del calvario y Dios revocó y clavó en una cruz toda enfermedad y maldición decretada para ti.

Esta bien estar informado, pero no puedes aceptar lo que dice el sistema, porque ellos siempre esperan lo peor. Y los hijos de Dios ya tienen una promesa.

Es difícil ver a un hijo de Dios que crea en él y que tenga escasez, porque Dios te da el alimento de cada día. Dios te da de acuerdo a la capacidad que tienes para administrar.

Los pensamientos de Dios son de bien y no de mal, que el mundo espere lo que quiera, pero tu espera cosas que ojo no vio ni oído oyó, eso es lo que Dios tiene preparado para ti.

Así como la fe es por el oír, el miedo también viene por el oír. Tu estas escuchando palabra de fe y eso vendrá, tu escuchas puras cosas malas y negativas y eso vendrá, porque lo que temes te sobreviene. Todos se tienen que preparar porque lo que viene para los hijos de Dios será lo mejor, eso es lo que viene para los que le aman. El mundo puede decir muchas cosas, pero para los hijos de Dios vienen cosas grandes del cielo. Sólo tienes que esperarlo y creerlo.

Habla con gente que espere siempre lo mejor. Porque si estás con alguien que no tiene fe ni busca a Dios eso se transmite. Dios preparó algo bueno para los que le aman.

Rompe con el vocabulario de conformismo y pasividad y demanda lo que él cielo determinó con tu vida y todo lo que posees.