Un discípulo de Jesús no es aquel que está pendiente de lo suyo sino que está pendiente de manifestar a Jesús por encima de lo suyo. Dios prueba un discípulo en las circunstancias y en medio de las circunstancias de su prójimo.

Proverbios 18:21 RVR09

[21] La muerte y la vida están en poder de la lengua; Y el que la ama comerá de sus frutos.

La vida de una persona refleja los frutos de su lengua. Eres lo que tú mismo hablas de ti. Eso es lo que reflejas.

El evangelio de Dios está en la biblia pero no en la vida de los que la predican.

Debes creer lo que Dios dice.

Hablar de vida es hablar de las perspectivas de Dios sobre cada aspecto de tu vida, hablar de muerte es referirse a lo opuesto a la vida proclamando la derrota o la queja constantemente.

Muchos dicen que están en victoria pero hay que ver su vida y lo que sale de la persona para ver si es verdad.

El diablo sin persona no podría manifestarse en al tierra. Jesús y el Espíritu Santo tampoco pueden manifestarse en la tierra sin el ser humano.

Lucas 4:1-12

[1] Entonces Jesús, lleno del Espíritu Santo, regresó del río Jordán y fue guiado por el Espíritu en el desierto, [2] donde fue tentado por el diablo durante cuarenta días. Jesús no comió nada en todo ese tiempo y comenzó a tener mucha hambre. [3] Entonces el diablo le dijo: Si eres Hijo de Dios, di a esta piedra que se convierta en pan. [4] Jesús, respondiéndole, dijo: Escrito está: No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra de Dios. [5] Y le llevó el diablo a un alto monte, y le mostró en un momento todos los reinos de la tierra. [6] Y le dijo el diablo: A ti te daré toda esta potestad, y la gloria de ellos; porque a mí me ha sido entregada, y a quien quiero la doy. [7] Si tú postrado me adorares, todos serán tuyos. [8] Respondiendo Jesús, le dijo: Vete de mí, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás. [9] Y le llevó a Jerusalén, y le puso sobre el pináculo del templo, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate de aquí abajo; [10] porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden; [11] y, En las manos te sostendrán, Para que no tropieces con tu pie en piedra. [12] Respondiendo Jesús, le dijo: Dicho está: No tentarás al Señor tu Dios.

Es necesario despertar a la verdad de la palabra. Jesús estaba lleno del Espíritu Santo.

Ningún discípulo lleno del Espíritu Santo se esconde ni le tiene miedo a los demonios o al diablo. Sí lo que tú sabes no ha hecho nada por ti, es imposible hacerlo con otro.

El Espíritu Santo primero llenó a Jesús, luego lo llevó al desierto y se lo puso al diablo en frente.

Jesús estaba lleno del Espíritu Santo, si tú te llenas del Espíritu también puedes discernir, comprender, soportar, no caer en tentación, tener la victoria. Nadie estando vacío tiene poder y tampoco puede soportar.

Si eres hijo de Dios demuéstralo con tu vida, no cayendo en la tentación del diablo.

No puedes solo decir, también tienes que escuchar al Padre, para poder ser lleno del Espíritu Santo y así tener la capacidad de conocer el mundo espiritual. El natural lo conoces todos los días.

Cuando el Espíritu te llena te hace discernir qué ofrecimiento viene de parte del diablo. Él tentó a Jesús de manera sutil, con puras cosas de la tierra. Dios te ofrece lo sobrenatural.

Por eso una iglesia llena es la respuesta para el mundo.

No solo de llenar el estómago vive el hombre, eso un día se acabará, pero si llenas tu espíritu estarás siempre preparado para la batalla.

El diablo no te puede dar nada que Jesús ya no te haya dado. Toda tu vida te la ha dado, familia, hijos, trabajo, salud, dinero, todo. No puedes ser mendigo cuando estás sentado en la mesa.

Jesús conocía la voz del diablo, conocía cuál era el propósito de tentarlo, pero también conocía el propósito de su Padre para él en la tierra, conocía y conoce todo. Él conoce todo en la tierra, lo que necesita son vasos para llenarlos y que tengan la respuesta para el desesperado en la tierra.

Es espíritu con biblia, no conceptos con biblia, no conocimiento con biblia. El diablo le habló con palabra y él le contestó con palabra.

El diablo va a trabajar con lo que tú tienes y dices. Porque cuando tú hablas, tu palabra tiene poder y sucede, porque tienes la autoridad en la tierra, por eso te tienta para que tú lo digas con tu boca y él pueda trabajar.

Si piensas que lo que tienes lo tienes por tus fuerzas y por eso vives para ello, eres un miserable. Sí de eso dependes y para eso vives día a día ese es tu dios.

El propósito del diablo sobre Jesús era que se doblegará a su propósito, que no era un propósito carnal sino evitar la salvación de la raza humana y así mantener su gobernabilidad en ella.

Dios trabaja con personas determinadas y decididas.

Tienes que saber que Dios te reservó y te eligió para estos tiempos. Pero es necesario que renuncies a tu propósito y te unas al de Dios.

Es necesario que te vuelvas a las escrituras para poder evitar la tentación y saber qué contestarle de acuerdo a la palabra.

Jesús no se doblegó al propósito de satanás sino que se mantuvo en su confesión “Escrito está”. Luego lo dejó por un tiempo, pero regresó a tentarlo con diferentes personas y manifestaciones.

El diablo sabía que si doblegaba a Jesús él se mantenía gobernando a la raza humana, él quería que confesara para ganar la batalla.

El pueblo de Dios es quien puede acabar con todo lo del diablo, por eso no puede hablar lo que el diablo quiere, ni confesar lo que el diablo quiere, sino mantener su confesión en que Dios no dijo eso y Él lo hará. El único que puede cambiar las circunstancias es quien tiene el poder en su boca. Es quien tiene el poder de atar y dedatar el mundo espiritual.

¿Cuántas veces has sido tentado en decir y confesar lo contrario a la palabra de Dios?

El diablo no movió a Jesús porque él sabía cuál era la respuesta.

Nadie puede maldecir a la iglesia que está de pie creyendo en lo que Dios va a hacer.

Por encima de lo que escuches o ves cree lo que Dios dijo, porque aunque la promesa tarde se cumplirá.

No cambies la confesión, mantenla en Dios y su palabra.