El diezmo incircuncisa tu corazón. Lo limpia de enfermedad, de circunstancias, de todo lo inmundo.
De todo lo que Dios le dio a Adán le dijo que podía comer, menos de un árbol en específico, y ese árbol representaba el 10%. Todo te lo puedes comer, pero el diezmo es ese árbol prohibido que no puedes tocar, es el 10% de todo lo que Dios te da.
A consecuencia de la desobediencia de Adán se rompió algo, y esa desobediencia fue comer lo que Dios le dijo que no comiera, el problema no fue solo comer, sino desobedecer.
Dios te da una cantidad y te dice que el 10% no lo puedes tocar, porqué es para él.
El mismo que te seduce para que te comas el diezmo, es el mismo que se le apareció a Eva en el Edén.
No recibas la palabra en el intelecto sino en el corazón.
Aunque parezca insignificante lo que hizo Adán trajo como consecuencia la muerte de su propósito y la ruptura de la relación y la comunicación con Dios.
Malaquías 3:10
10 Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde
La persona que se desconecta del diezmo de la casa de Dios pasa a ser un rebelado de la casa de Dios. Cuando empiezas a sacar el diezmo de su casa eres el próximo punto focal de rebelión. Cuando eso pasa, la palabra que sale de tu casa por medio de la boca del hombre de Dios deja de alimentarte. El diezmo te conecta con el pan que Dios te da en su casa.
El que se desconecta de la casa de Dios, empezando con el diezmo, está en peligro porque empieza a cuestionar lo que sale de la boca del hombre de Dios. Sufres desconexión del alimento de la casa cuando dejas de diezmar.
División significa que existe dos visiones distintas en el mismo lugar y eso también sucede al dejar de diezmar. No puedes tener una revelación distinta a la del hombre que Dios escogió como cabeza de su casa. Lo que él trae a está casa es lo que tú necesitas.
Adán y Eva se comieron el diezmo del huerto del Edén y a partir de ahí no fueron los mismos, y no hubo vuelta atrás. Es hora de enderezar el camino.
Aunque puede haber muchos motivos de tu enfriamiento, el no dar diezmo es uno de esos motivos.
Génesis 20:11-12
11 Y Abraham respondió: Porque dije para mí: Ciertamente no hay temor de Dios en este lugar, y me matarán por causa de mi mujer. 12 Y a la verdad también es mi hermana, hija de mi padre, mas no hija de mi madre, y la tomé por mujer.
Abraham en vez de estar más consagrado con Dios por lo que le dio, empezó a distraerse con lo que recibió, y Dios vio que era el momento de circuncidar su corazón. Sí lo que pediste empieza a distorsionar tu camino Dios toma cartas en el asunto. Debes venir con un corazón entendido. Todo lo que Dios te dio si te distorsiona empieza a quitártelo, porque antes de perderte prefiere quitarte lo que te dio.
El diezmo te limpia de la avaricia y del desamor.
El diablo no solo hace que saques el diezmo de la casa de Dios sino también tu corazón.
De nada sirve que digas que amas a Dios y lo desobedeces, porque tu corazón está lejos de él. Quitarte todo es el medio que Dios tiene para atraerte de nuevo a él.
Adán perdió el huerto y con eso la provisión. Pero Abraham con su obediencia fue multiplicado.
No habrá multiplicación hasta que tu corazón no sea circuncidado y le demuestres a Dios que no te importa lo que te da y que no lo amas más que a él. El sinónimo de Dios es dar, tanto fue su amor que dio todo lo que tenía.
El mayor acto tuyo de amor a Dios es darle, pero más que él acto mismo, es darle tu corazón cuando lo haces.
El diezmo circuncida nuestro corazón. No es manipulación, es estar interesado de que no te falte nada, tu provisión la tiene Dios y con él es que debes tener compromiso y fidelidad.
Tu papá es el dueño del oro y de la plata, pero si no eres fiel con el dinero del mundo, cómo te va a confiar el oro y la plata que tiene en el cielo
Dios te puede dar más, no te enamores de lo que tienes, el que te dio, y te puede dar más. Fue su mano que te dio lo que hoy tienes. Vuelve tu corazón a Dios.