Isaías 3:10
Decid al justo que le irá bien, porque comerá de los frutos de sus manos.
Dios hace un cerco a los justos, mientras el mundo está siendo juzgado y está recibiendo las consecuencias de su maldad, no te preocupes, si tu vives cómo dice la palabra no te tocará a ti porque tu eres un justo de Dios, así te llama tu Padre.
Mientras Dios juzga a todos los que hacen el mal le manda un cerco a sus hijos. Dice en su palabra que mientras pase todo esto estarás bien. Todo lo que el diablo quiere poner en tu mente se va porque no tienes que entrar al reglón de lo malo, porque Dios te dice que a ti te va a ir bien, pase lo que pase. Esto no es una palabra de motivación, es una palabra de fe que tienes que poseerla. Que tu fe no se raje por lo que está pasando, porque escrito está que al justo, es decir a los hijos de Dios, le irá bien.
El diablo quiere decir que hay caos y escasez, pero escrito está que Dios te manda a decir que te va a ir bien.
Si no estás bien parado el diablo te va a venir a arrancar la palabra, pero tú debes saber quién te está hablando hoy, no es una persona, es Dios, porque Escrito está. El diablo se mete en la gente para decirte que todo lo que te están diciendo es mentira, pero no le creas. Haz como Jesús, que venció al diablo con la palabra cuando vino a tentarlo, dile Escrito está y contra esa verdad no hay ley ni mentira que venga a prevalecer.
Cada vez que venga el diablo a tocar tu puerta no temas, porque Escrito está y tú solo tienes que decirla, porque todo lo que el diablo dice es ilegal, diga lo que diga y haga lo que haga, defiende lo que Dios te está diciendo, si tú lo crees es suficiente, aunque para otros sea imposible, porque solo para el que cree todo le es posible.
Hay personas que te quieren, pero te quieren hasta que tienes más que ellos. Porque te quieren tanto que no te quieren ver mejor que ellos. Empiezan a decir que qué te crees, pero no es que te creas, es que eres, camina creyendo quien eres porque eso es identidad, no importa que el diablo se irrite, tu eres bendito, y no es que te crees, es que eres bendito, porque Escrito está.
Escrito está que tú serás bendito y todo lo que tocares con tus manos bendito será.
Que Dios te de capacidad para recibir y un corazón entendido para dar, un corazón como el de Dios, porque hasta que no tengas ese corazón para dar como Él da, no podrás recibir.
Pide un corazón sensible, bondadoso que se rinda ante Dios y ante la necesidad de tu prójimo.
No olvides que Dios te dio la capacidad y la bendición para hacer lo que sabes hacer y bendecir, multiplicar y fructificar todo lo que tus manos toquen.