Palabra de Diezmo y Ofrenda
Aunque tengas ataques y pensamientos que quieren entretenerte no pares de alabar a Dios. Cree en el Dios que te sana, te prospera, te da de comer, te da vida y aliento, cree en quien pelea tus batallas.
Dios no esta pendiente de la cantidad sino de la calidad del corazón que lo da.
Efesios 1:7 Gálatas 3:13
La palabra redimir significa comprar. El sacrificio de Jesús en la cruz nos redimió, es decir nos compró de la esclavitud, nos redimió de la maldición de la ley. Y esto fue posible porque en el madero Cristo fue hecho maldición, fue nuestro sustituto perfecto y tomó nuestro lugar.
Lo que activa la maldición en nosotros es el pecado. El fue maldito para nosotros ser benditos. Lo único que le abre la puerta a la maldición es el pecado que se manifiesta en nosotros.
Hemos sido redimidos de la autoridad de Satanás, Jesús te hizo libre, cuando decidiste cambiar de vida. El nos cambió de lugar y nos pasó de un lugar de maldición a uno de bendición. No basta con una confesión de fe, se trata de un estilo de vida. Pero si confesaste y seguiste con la vida que tenías debes de confesar de nuevo y vivir como Jesús.
Si entiendes lo que Cristo hizo por ti debes cambiar tu vida para que puedas gozar los beneficios de la redención. Un cristiano que no ora no puedes ser parte de esa bendición y no eres hijo de tu papá. Sino oras tienes que arreglar tu relación con Dios.
Uno de los beneficios es vida eterna, pero para gozar de él debes estar libre de pecado. Así que si no eres libre de esa esclavitud no sirve de nada estar en un local y alabar con la boca, ese beneficio no se hace verdad hasta que te libres del pecado.
Para muchos cumplir con los mandamientos de Dios es religión, y resulta que sino cumples con ellos tu alma se perderá. La santidad si es posible y es una decisión y determinación. Muchos se tienen que proponer, determinar y decidir en dejar ese viejo hombre, cuando decides vivir para Dios debe irse de ti todo lo pecaminoso. No es cambiar conceptos, es cambiar de vida.
Tu papá es Santo por lo tanto tu debes ser santo si eres su hijo. Lo que es pecado es pecado, no es error ni debilidad, llama las cosas como son, pecado es pecado y lleva a la muerte. Él te quiere dar más, pero debes alejarte de la muerte. Cierra la brecha donde lo bueno sale y lo malo entre sin cesar.
El que te pierdes eres tú, no el camino. La circunstancia que te lleva a reflexionar es la que te hace cambiar, aplica eso en tu vida. Sí lo que te sucedió fue lo que te detuvo a seguir con lo malo y te llevó a buscar a Dios dale Gloria. Estas vivo porque te destruyó, así que dale gracias.
Esto es lo que te garantiza vida eterna y resurrección. Pide el espíritu vivificador. Estos son los beneficios de la presencia y el pecado es lo que nos aleja.
Todos somos santos al cuestionar el pecado de otros. No cuestiones, ora y pide que cambie a esa persona, no juzgues.
1 Pedro 2:24
No es la voluntad de Dios que estés enfermo, Dios te hizo libre de la maldición de la enfermad
2 Corintios 8:9
Dios quiere que seas próspero y vivas en abundancia, el dispuso todo para ti.
Romanos 8:32
1 Pedro 1: 3-4
No tengas miedo, aunque muchos digan que no naciste para eso, Dios ya lo destinó y dispuso todo para ti para que fueras exitoso.
Tomó lo malo que te correspondía a ti para que tu fueras feliz y exitoso. Créelo, aléjate del pecado y vive los beneficios.
El propósito de la cruz fue devolverle a ti una nueva oportunidad de levantarte y ser exitoso. Todo fracaso es un nuevo camino al éxito.
Jesús te redimió de la maldición porque él pagó por ti una deuda que no podías pagar. Jesús murió y con eso te hizo participante de tu herencia, murió por ti y su sacrificio sigue vigente.
El propósito siempre será perseguido, herido y atacado. El diablo quiere neutralizar a sus hijos, pero no podrá. Pero el Señor neutralizará esos ataques.
Dios Salió a Nuestro Encuentro
Quizá la distancia de tu casa a donde él está es lejos, pero la buena noticia es que él ya salió y pronto escucharás tocar la puerta.
Algo grande va a pasar y nadie lo va a poder detener.
Dios ha visto tus lágrimas y ha visto tu pasión por él a pesar de lo que has estado viviendo. La tierra se está alineado al cielo y se manifestará porque Dios ya peleó tu batalla y ganó ya Sios determinó que a tu casa llegaría.
Ya no vas a botar lágrimas por las circunstancias sino porque el Señor de señores llegó a ti encuentro. Se abre los cielos sobre.
Dios sacó a Daniel del horno calentado 7 veces, así también hará contigo.
Todo lo que depositó en los hombres y mujeres de la Biblia lo depositará en ti, como fueron visitados ellos a ti también te visitará porque ya salió a tu encuentro.
El Padre se va manifestar en tu hogar, en tu familia, en tu vida.
Reconoce a Dios como tu verdadera y única autoridad.
Serás revestido y las personas lo reconocerán por dónde camines y a donde vayas, no porque te parezcas a un pastor o un ministerio sino porque te parecerás a Jesús de Nazaret.
La bendición dependerá de la consagración.
Hay algo que Dios decidió hacer, pero si dudas lo que Dios dijo retardarás la tocada de la puerta de tu casa. Dios va a empezar a tocar puertas, si abres y le permites entrar él se sentará contigo u comerá contigo. Está a la puerta y está tocando, debes identificarlo.
Dios te va a demostrar que es el dueño del oro y la plata y te bendecirá, no para gastarlo en medicinas sino para que tu lo sepas administrar. Y mientras más te da se multiplicará.
No te vayas de donde está Dios, Él no busca adornos ni adornarte porque los adornos fue lo que Israel usó para hacer el becerro de oro, Dios busca transformarte, restaurarte y cambiarte.
Dios vino a tu encuentro y va a pasar lo que ya él dijo, empezará hoy.
Si haces lo que Dios te dice lo demás empieza a añadirse.