Aunque no haya electricidad en dónde te encuentras, tu lámpara debe estar encendida. Es importante que seas una persona que des luz en medio de las tinieblas. Eres luz y debes dar esa misma luz que eres.
Mateo 5:14
Si eres lámpara, luz en el mundo y tienes luz, debes hacerte una pregunta ¿A cuántos le estás dando luz en tu casa y en tu entorno? La luz reprende las tinieblas y la luz no puede estar debajo de una mesa, esto no se refiere a ser reconocido públicamente para poder alumbrar, si tú eres luz debes darle luz a los que integran tu casa y que no son creyentes. La luz de Cristo no se puede apagar, no se debe esconder, debes dar luz a los que están contigo y a tu alrededor.
La luz que das habla de ti, por eso debes ser cuidadoso con lo que das, porque ella debe reflejar a Dios, tus obras y vida deben ser buenas. Eres representante de Cristo en la tierra y lo que hagas y digas hablará de Él, debes dar buen testimonio de lo que Dios ha hecho en ti y dar luz, porque muchos pueden ser luz, pero sin alumbrar a los que le rodean.
1 Pedro
La luz que alumbras para ellos debe ser la de Cristo, porque son muchos los que hay afuera que no dan testimonio con lo que hacen y manifiestan, pero tú eres distinto.
La palabra de Dios es como lámpara, ella es tu luz, así que la luz que tú das debe estar segmentada en esa misma palabra. Si tú no te llenas de Dios y su palabra ¿Cómo vas a alumbrar a otros? ¿Cómo vas a llenar a otros si tú estás vacío?
Y no solo se refiere a conocimiento, es que lo que conozcas lo vivas, porque de nada sirve saber mucho de la biblia y hablarla sino la vives y no tienes al Espíritu Santo.
Salmos 119:105
Tu puedes estar muy lleno de Dios y de su palabra, pero sino amas no alumbras. El amor de una persona es la esencia pura de Dios, es lo principal que Él manda. Sino amas, esa lámpara está apagada, tú alumbras con tu testimonio, tu eres y debes ser diferente. Si vives en contienda, en rencilla, en molestia, amargura y pelea con otros, es porque entonces no estás alumbrando.
La lámpara sirve para alumbrar en medio de la oscuridad. Si tu lámpara de verdad tiene aceite esa palabra va a permanecer, pero sino vives de acuerdo a ella de nada sirve. Puedes tener tu lámpara, pero sino la tienes encendida, de nada sirve. La palabra es lámpara, una lámpara que te enciende a cuando la lees.
Hay muchos que quieren encender la lámpara de otros pero sin ellos vivir con su lámpara encendida, la palabra que sale de tu boca debe estar llena del Espíritu Santo, porque cuando sale y no tiene el aceite nada sucede. Cuando le hablas a otra persona lleno del Espíritu Santo, algo sucede. Sin su llenura lo que digas es totalmente vacío y nada hace, así seas el mejor teólogo del mundo y conozcas y sepas toda la palabra, el Espíritu Santo es el aceite que da vida.
Juan 14:26
A donde Jesús llegaba era luz, porque Él siendo hijo de Dios dio un testimonio perfecto. Tienes una responsabilidad como Cristiano que muchas veces no le prestas atención. Donde se encuentra la luz no puede permanecer oculta, sino que debe alumbrar a quien tiene a su lado. La voluntad de Dios es que tú alumbres.
La palabra de Dios es viva y eficaz. La lámpara que existía en el tiempo de Jesús tenía depósito para el aceite y tenia una mecha, quizá no alumbraba todo el camino por dónde se iba, pero alumbraba lo suficiente para no tropezar y ver el camino por donde se iba. Así es la palabra de Dios, si no la lees te tropiezas en cada paso y cae tu fe, la palabra te debe alumbrar en cada paso que des.
Mateo 25:1
Las vírgenes insensatas no estaban preparadas para recibir al esposo. Y actualmente hay muchos creyentes así, un ejemplo es cuando va un vecino a tu casa y empieza a quejarse y tú le sigues las quejas, la pregunta es ¿Dónde está tu luz? No puedes hablar lo que otros hablan, debes ser distinto, no permitas que un ciego quiera guiarte, tu llévalo a tu luz. No te quejes, cítale la palabra y tu paz le predicará.
La biblia es la luz para ti. Cuando tú lees la palabra te dice que tan mal estás. La luz que tienes y que alumbra a otros también te alumbra a ti, así que debes ver primero cuando ella te alumbra a ti y reconocer ¿Cuál es tu condición? Para cuando tú estés bien, limpio y preparado puedas salir a alumbrar a otros.
Si algo estás haciendo mal la palabra es la que te lo dirá. Hay muchas cosas que puedes estar haciendo mal, que otros ven y tú no, y precisamente la palabra es la que te revelará qué estás haciendo mal. El teléfono del cielo es la palabra, pero sino la lees no puedes conocer los mensajes que Dios envía para ti.
Tu lámpara tiene que estar encendida.
El aceite es al Espíritu Santo, cuando la lámpara está llena el fuego se mantiene encendido.
La lámpara representa la palabra, el Espíritu Santo representa el aceite de la lámpara, las 5 insensatas representan a las personas que son conocedoras de la palabra pero en conocimiento, sin arrepentimiento y convertimiento.
¿cómo obtienes el aceite del Espíritu Santo? Velando y orando para que el fuego de tu lámpara se mantenga encendido y alumbre tu camino. El Espíritu Santo es el que mantiene el fuego encendido.
Proverbios 6:23
Las vírgenes representan la iglesia. Sin aceite no hay fuego, sin fuego no hay luz, así es igual con los creyentes, sino tienen al Espíritu Santo no tienen aceite, por lo tanto no hay luz, y sin luz no hay arrepentimiento ni convertimiento.
Si tu lámpara no está encendida no puedes irte con Jesús. Porque Él viene a buscar a los que tienen la lámpara encendida, a una iglesia llena del Espíritu Santo. La iglesia con Cristo debe vivir apasionada de buscarle y de conocerle.
Pero ¿A Cuántos les gusta buscar a Cristo y se esfuerzan para conocerle cada día más?
Si no vives lo que tú predicas la palabra que sale de tu boca no va a hacer efecto a quien le predicas. Si tú eres desobediente y quieres corregir a otro desobediente nada pasará, porque no tienes la autoridad y la unción para que suceda. Si vives en desobediencia y vienes a exhortar a otro nada pasará, primero ve hacia adentro para ver si estás cumpliendo con lo que quieres corregir en otro.
La palabra sin aceite carece de poder.
Mateo 7:21
No es el que dice, es el que hace, no es el sabe, es el que vive, y debes procurar en ti hacer cada día lo que el Padre manda.
Cuando estás en tinieblas todo tu cuerpo permanece en tinieblas, por eso las personas carentes de Dios y vacías de Dios se notan y se reconocen en su rostro. Cuando alguien busca de Cristo hay una luz que refleja algo distinto en ella. Cuando Moisés bajó del monte tenía una luz que no dejaba que nadie lo pudiera ver. Cuando alguien busca de Dios no se nota por como viste o lo que dice solamente, sino también por lo que refleja su rostro. Y a muchos se les nota cuando tienen mucha teología pero No están llenos, hablan pero nada pasa porque no están llenos del Espíritu Santo, se siente en el ambiente, en la atmósfera, que nada hay en él, en cambio se nota cuando habla alguien lleno del Espíritu Santo y suelta una palabra llena del Espíritu, ella penetra y algo sucede en el mundo espiritual.
El Espíritu Santo hace ver cuando alguien está lleno o no.
A dónde Dios te envía hay un propósito, sino hay propósito Dios te saca de ahí. Y tú debes procurar cumplir el propósito que Él te ha puesto, y para hacerlo debes mantener tu lámpara encendida. Si tienes tu lámpara encendida ella te alumbrará el camino y llegarás victorioso hasta el final.
Puedes estar en lugares donde no quieres o no te gusten, pero resulta que ahí Dios tiene un propósito, hacer algo en ti o algo en otros.
Si alguien te viene con quejas, con chisme, con crítica o cosas malas, háblale del poder de Dios en tu vida, lo que hace, lo que ha hecho y lo que hará, puede que en el momento no pase nada, pero ten la seguridad de que con el tiempo esa persona va a buscar esa paz que tú reflejaste, manifestaste y necesitas.
La oscuridad científicamente no existe, sino que es la carencia de luz en un lugar. Así que a dónde vayas con tu lámpara encendida debes hacer que tú luz brille y alumbre las tinieblas de otros.
Todo el mundo necesita de Cristo, lo reconozca o no, y tú eres lámpara para ellos, así que procura estar lleno de aceite para que tú lámpara permanezca encendida todo el tiempo y alumbe a todo el que necesite, para que ellos también se conviertan en lámpara y alumbren a otros, mantente velando y orando. Si tú tienes luz a donde llegues no puede haber tinieblas, si hay es porque no estás alumbrando.
Tu luz en algún momento va a provocar algo en las tinieblas de los que te rodean. Eres luz a donde vayas, y representas a Cristo a donde vayas. Mantén la luz de tu lámpara encendida.