Él pagó por ti
2 Corintios 8:9-13
Él por amor a ti se hizo pobre, siendo rico, para que tú fueras enriquecido.
Tres cosas hizo nuestro Señor Jesucristo en la cruz, salvarte, sanarte y prosperarte. Así como creíste que cuando lo conociste el vino a salvarte, también debes entender que vino a sanarte y prosperarte. El ahí pagó un alto precio para que no te falte nada y tu cuerpo tiene que obedecer a ese sacrificio que Él ya hizo.
Toda enfermedad fue pagada y también toda prosperidad fue pagada. Cada latigazo y herida en su cuerpo era para que a ti no te faltará nada, por ende nada te puede faltar, ahí estaba incluido tu ropa, tu calzado, tu alimento, tu cuerpo, es una prosperidad integral.
Por eso nada de lo que el diablo te presente te tiene que preocupar porque Jesús lo pago todo por ti.
Puede que estés desesperado en estas fechas porque la idea que siempre han dado es que es la época para tener, y la buena noticia, es que aunque hoy no tengas y tampoco tengas de dónde sacar es que Jesús ya pagó por ti, toda tu provisión no solo para este mes sino también para todos los meses del año.
En la cruz no tenía ropa, pantalón, camisa, nada para vestirlo y fue para que tú lo tuvieses hoy. La revelación de esta verdad hoy debe hacerse visible en tu vida, hogar y familia. Él ahí llegó pobre para que a ti no te falte nada.
Por amor a ti.
Jesús te salvó, te sanó y también desde la cruz te prosperó. Por eso dale gracias y pídele perdón por todas las veces que de tu boca a salido quejas y ellas han anulado la fe de lo que Él vino a hacer.
El que llama se le abrirá. Hay algo que estabas tocando pero no habías visto, así que clama con todas tus fuerzas, no sé que necesitas, pero hoy con el clamor de tu voz se va a abrir, levanta tu voz y comienza a llamar que se te abrirá.