Nuestro Dios murió pero también resucitó. Nuestro Jesús no está muerto, no siguió en la tumba, por eso le alabamos, porque en Él tenemos la respuesta para todo, eso te hace más que vencedor, tu ADN es de un vencedor. Estamos acostumbrados a orar porque tenemos habladuría pero no la palabra de Dios en nuestra […]